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En Caseros se agotó el stock de aceite, harinas y hasta las heladeras de todas las carnicerías de la Av. Mitre y zonas de influencia.
Algunos criticaron al Gobierno y otros al campo por el lock out patronal que tiene en vilo al país pero voces cercanas a la familia Ríos, indicaron que un individuop de prominente cabeza tiene un hambre bárbaro y barrió con todo.

martes, 15 de enero de 2008

Cambio de mando

Algunos ya lo sabían por charlas, a otros ya se los adelanté por una cuestión de respeto pero todos lo intuían hace rato y si no lo hice antes era porque no había otras manos que quieran recibir la tarea.
No seré más el entrenador de Rancho y al margen de la mala campaña, los resultados obtenidos, los problemas para armar el equipo, solo una pequeña parte tiene que ver en la decisión.
Hace rato que no disfrutaba el cargo que amé durante más cinco o seis años y antes que termine de agotarme definitivamente de todo, prefiero delegar la función para seguir ligado al equipo en forma activa pero sin sentir el peso de ser el eje de absolutamente todo lo que tenía que ver con Rancho.

Como formalidad les pido disculpas por todos los hechos que le molestaron de mi gestión. Sólo fueron causa de buscar siempre lo mejor para el equipo. Y bajo esa premisa, lo mejor ahora es que se renueven los aires y pueda recuperar energía y alegría en manejar al grupo. No es mi momento el actual para hacerlo.

Les agradezco a todos la forma en la que se brindaron desde que estoy al frente. Cada uno sabrá personalmente el grado de las mismas.
Me peleé con varios y me enojé con muchos pero lo importante es que siempre se pudo hablar de las cosas y dejar en claro que la disputa era sólo futbolística, cosa difícil de separar cuando se trata de un grupo de amigos.

Ahora me volcaré de lleno a la “simple” función de delegado y a jugar cuando se me considere necesario.

Formar un plantel de 15 jugadores (al margen de las muchas bajas) me dio libertad para por ejemplo, destinar un día a mi vida personal y ahí empezó a gustarme la idea de delegar funciones. Después me fui de vacaciones y Lea adoptó la capitanía que seguirá teniendo, Ale armó el equipo y la rueda siguió su camino.
No era saludable centralizar todo porque empezaba a cansarme ser el centro de cada actividad o decisión del equipo sea dentro o fuera de la cancha.

Rancho seguirá jugando sin Facundo Bochatay, eso es lo más importante de todo esto.

Ahora será el turno de Ale, tiene las ganas y la convicción necesaria para hacerlo. Obviamente siempre podrá contar conmigo para lo que necesite, desde un mail en la semana hasta un cambio en el entretiempo.

Se podrá discutir si dar un paso al costado y seguir cerca es bueno para el equipo, no voy a meterme en sus opiniones y voy a respetarlas, pero NO tengan ninguna duda, que será lo mejor para mí porque lo necesitaba hace ya mucho tiempo.

Gracias por confiar en mí durante todo este tiempo, lo mejor para este año.

Abrazo para todos

Facundo Bochatay

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